¿Te acordás la última publicidad que viste? ¿El último anuncio que te llamo atención? ¿El último spot en la tele?
Es muy probable que te tome tu tiempo para pensarlo, por la sencilla razón de que estamos saturados de publicidad desde que abrimos los ojos.
Estamos viendo ese video atentamente y se corta en medio con un anuncio. Vamos manejando por el 2do anillo y estamos rodeados de vallas ¿Te acordás de la última valla que llamo tu atención?
Una publicidad que la mayoría de las veces nos interrumpe, nos persigue y, lógicamente, empezamos a rechazarla.
Aun así, creemos que nuestro anuncio 2×1 en Facebook va a funcionar, que nuestro Call to Action de “¡COMPRA YA!”, nos dará conversiones o que nuestro arte de “Somos los mejores” nos colocará en el Top of Mind del consumidor.
Demasiado ingenuos. Puede ser que el 2×1 nos genere ventas, claro que sí, un 5% sobre el 100% de personas que vieron el anuncio, pero ¿qué pasa con ese 95%? ¿así lo estamos conquistando? ¿qué tipo de relación estamos cosechando a largo plazo con nuestros consumidores?
Podés comunicar tus descuentos o promociones con una historia divertida o al estilo de tu marca, sin utilizar la publicidad directa como principal recurso, porque siendo honestos, no tiene futuro.
La cruda realidad es que la publicidad está muriendo, por la simple razón de que nadie busca publicidad, las personas buscan experiencias. Esto se acentúa en los millennials que tienen expectativas y demandas altas, rechazan la publicidad invasiva y buscan publicidad auténtica y personalizada y, actualmente, ¿quiénes son nuestros clientes? En la mayoría de los casos, ¡ELLOS!
Futuras tendencias predicen que el 63% de los millennials terminará en algún momento utilizando bloqueadores de anuncios. En Bolivia aún no tenemos data de cuantos usuarios de Ad – Bloquers (Bloqueadores de Anuncios) existen pero el crecimiento de su uso es indudable.
¿Y ahora? ¿Cómo le hacemos frente a este apocalipsis de la publicidad?
La publicidad no es más que la punta del iceberg de todo lo que hay por detrás de nuestra marca. Sin embargo, hoy en día culpamos a la publicidad por no vender nuestro producto o por quedarnos estancados.
Yo tengo para compartirte 8 consejos preventivos para protegerte de la posible desaparición de la publicidad, que a mi juicio, pueden ayudar.
1. El consumidor sobre todas las cosas
Cambiemos nuestra lógica empresarial y pongamos al cliente por delante, si eso incluye cambiar nuestros procesos internos o perder plata, arriesguemos por ellos. Dejemos de lado el egocentrismo empresarial.
2. Encuentra el camino, encuentra TU PROPÓSITO.
Si tu marca busca trascender, encontrá su propósito y preguntate que impacto positivo genera en el entorno, descubrí esos valores intangibles que conectan tu marca con el consumidor. Conocer el valor de tu marca es una vía para encontrar su propósito.
3. Cambiá la clasificación de tu negocio, (H2H)
Una vez escuché este concepto y me encantó, porque en vez de hablar de una empresa que se dirige a B2B (Business to Business) o B2C (Business to Consumer) hablamos de H2H (Human to Human) una empresa de humanos que se dirige a humanos. De esta manera nos volvemos más empáticos.
Si quierés que las personas AMEN tu marca, empezá por convertirte en una marca humana que genere valor, es probable que ya leíste o escuchaste esto antes pero todavía no lo has aplicado, intentalo y verás grandes resultados.
Observa el caso de Kiky, dejo de preocuparse por venderte 2×1 en pollo y empezó a buscar que te entretengas con su personalidad ¿Acaso te interrumpe su publicidad? ¿Quiere venderte? Sí, pero no te lo dice. Primero piensa en divertirte y después veremos si se te antoja un cuartito.
4. Cambiá tu objetivo
Si tu objetivo principal como empresa es vender, empezamos mal. Ese no debería ser tu objetivo, recordá que querés convertirte en una marca humana y entregar valor a un grupo de personas, por ende, vender es una consecuencia, no un fin en sí.
5. Determiná tu tribu o buyer persona
No a todo el mundo le vas a gustar, nadie agrada a todo el mundo. Lo mismo pasa con tu marca, si decís que tu marca es para todo el mundo, me puede sonar un poco soberbio, porque pocas son las marcas que TODOS necesitan.
Identifica ese grupo, tribu de personas que de acuerdo a tu identidad se identificarán con tu marca, entendiendo que ese pequeño grupo te amará
6. Identifica un valor REAL
Recordá que cuando hablamos de entregar valor, éste sea un valor REAL. ¿Por qué es importante entender esto? Porque si vemos valor en algo que para los demás no es “valorable” volvemos a caer en el egocentrismo. Dejemos que sea el cliente/consumidor el que defina qué es de valor.
7. Regulá la publicidad directa
Si estás utilizando publicidad invasiva, empezá a regularla y a optar más por mensajes relevantes, extraordinarios que le interesen a ese público que querés enamorar. Antes de publicar algo cuestionate… ¿Es relevante?
Antes de publicar las fotos de tu último lanzamiento pensá que la mayoría de la gente que verá tu anuncio no estuvo ahí, así que es probable que tampoco le interese.
8. Un factor clave: la comunicación
Tu comunicación con el cliente es lo mismo que una relación de pareja: si falla la comunicación muere el amor. Si tus canales de punto de contacto con el cliente están desatendidos, no esperés que amen tu marca.
Es muy común que nuestros canales digitales los dejemos en manos de un tal “Community Manager” de una agencia X que ni siquiera conoce a profundidad la esencia de tu marca, responde las consultas en modo cuasi “automático” y nunca se especializó en atención al cliente.
¿Tus clientes son lo más importante para tu marca? Entonces no pongás a un tercero a responder por ella.
Recordá el primer punto “El cliente sobre todas las cosas”. Poné un equipo altamente capacitado para esa función.
Quizás no sea el fin de la publicidad, sino el fin de cómo definimos y hacemos publicidad, más vale reinventarla antes de que muera.
La COMUNICACIÓN nunca va a morir, esa necesidad humana siempre estará vigente, la pregunta es…
¿Cómo empezarás a comunicarte?